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El Cicpc mata tanto como las FAES

Una policía que dejó de ser científica para sumarse a la matanza de venezolanos a través de ejecuciones extrajudiciales

Entre diciembre de 2019 y la primera semana de mayo de 2020, 1.020 personas fueron presuntamente ejecutadas a manos de funcionarios policiales en el territorio nacional. Ni siquiera la pandemia por la COVID-19 ha detenido la brutalidad policial.

1.020

presuntas

ejecuciones extrajudiciales

en el país

Las FAES matan…y el Cicpc también. Mediante un monitoreo de prensa y la documentación directa de casos en el Área Metropolitana de Caracas y el estado Lara, entre diciembre de 2019 y la primera semana de mayo de 2020, se determinó que la policía científica aparece como el segundo cuerpo de seguridad del Estado más involucrado en presuntas ejecuciones extrajudiciales.

Autoridades responsables de las ejecuciones extrajudiciales

Estados con mayor número de muertes a manos del

Fuerzas de Acciones Especiales

Estados
con mayor número de muertes a manos de las

La actuación letal de los cuerpos de seguridad del Estado se concentra en los barrios populares. Lo que los policías y militares denominan “operativos de saturación” en la práctica son razias indiscriminadas a través de las cuales se impone un estado de sitio y se violan los principios de uso proporcional, progresivo y diferenciado de la fuerza pública. Más recientemente, este tipo de razias se ha aplicado en los centros penitenciarios. Tanto en los barrios como en las prisiones el riesgo de masacre es permanente.

Razias que terminan en masacres

El Cicpc ha estado a la cabeza de muchos de los operativos que concluyen en masacres; es decir, cuando hay cinco o más fallecidos. La policía “científica” está involucrada en 6 masacres registradas entre diciembre de 2019 y mayo de 2020. Pareciera que el Cicpc pretende desplazar a las FAES como el principal victimario en materia de ejecuciones extrajudiciales.

El Cicpc masacra tanto como las FAES

Ejecuciones extrajudiciales en los barrios

En Caracas las FAES puntean

En el Área Metropolitana de Caracas, las FAES superan en 100 % al Cicpc en materia de presuntas ejecuciones extrajudiciales. Pero, la policía “científica” ocupa el segundo lugar del vergonzoso ranking.

Los modus operandi del Cicpc

Negación de socorro inmediato y efectivo

La negación de socorro inmediato es uno de los patrones más recurrentes en las actuaciones del Cicpc vinculadas a presuntas ejecuciones extrajudiciales.

Disparos en zonas vitales

Disparos a zonas vitales del cuerpo de la víctima (mayoritariamente al pecho) es otra de las prácticas recurrentes de los funcionarios del Cicpc. Por una abrupta pérdida de fluidos sanguíneos (shock hipovolémico) los disparos en zonas vitales causan la muerte de manera casi inmediata.

Hombres jóvenes en la mira

Los hombres jóvenes entre 18 y 31 años de edad son las principales víctimas de presuntas ejecuciones extrajudiciales a manos de funcionarios del Cicpc.

Irrupción violenta en las viviendas

Llegan tumbando la puerta y sacando a los familiares del lugar. Este es uno de los patrones que más se ha repetido en las actuaciones de los funcionarios del Cicpc durante el monitoreo hecho desde diciembre de 2019 y mayo de 2020.

Simulación de enfrentamientos

En 100% de los casos, las versiones oficiales de las presuntas ejecuciones extrajudiciales indican que las víctimas abrieron fuego contra los funcionarios policiales, en este caso del Cicpc.

Ensañamiento en los barrios pobres

Las actuaciones del Cicpc que concluyen en presuntas ejecuciones extrajudiciales se concentran en los barrios pobres del país.

El deshonroso segundo lugar

Con similar número de casos e idénticos patrones de actuación que las FAES, el Cicpc destaca como el segundo cuerpo de seguridad del Estado venezolano involucrado en presuntas ejecuciones extrajudiciales.

Créditos

Documentación
Erick González, Karina Peraza, Alejandro Romero y Alan Márquez
Ilustraciones
Jesús Diez
Infografías y gráficos
Carlos Gutiérrez
Edición
Marialin Lacourt
Coordinación editorial
Edgar López

LA MASACRE QUE DESENMASCARÓ A LAS FAES