Destacados, Reportes, Venezuela

Hija, hermana y abuela. Los tres frentes de Blanca

Reporte Proiuris 

Voces de los que se quedaron 

Blanca* es una mujer cabeza de familia, como muchas mujeres venezolanas, tiene 57 años  y vive en la parroquia Antimano en Caracas. Vive en la casa de su mamá, donde nació, creció, tuvo sus hijos y donde hoy cuida de su madre y de sus dos hermanos. Dos de sus  hijas migraron entre 2018 y 2020, ambas de manera forzada, la primera se fue para poder costear los gastos  familiares que se vieron aumentados por la enfermedad del abuelo que ya falleció, la segunda se fue para conseguir mayores ingresos que mejoraran su calidad de vida y  luego buscar a su esposo y a su hijo de dos años.

Blanca se ocupa de todas las labores del hogar y tomo la batuta de su madre quien ya no tiene el mismo vigor de antes, padece hipertensión arterial y problemas de circulación, en el cuidado de sus dos hermanos con discapacidad. Los quehaceres diarios los marca la dinámica del país, son cinco adultos los que viven en esa casa siendo Blanca y su actual pareja los únicos que perciben un ingreso fijo, la pensión de vejez que otorga el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales  que fue ajusta a finales de abril de 2022 a aproximadamente $30 mensuales.

Cuando indagamos más sobre su condición de vida y el acceso a derechos fundamentales se distiende explicándonos  que por ejemplo la luz no se le va mucho, pero que son constantes las fluctuaciones de voltaje que ponen en peligro los utensilios eléctricos. Del agua nos cuenta y normaliza que está bien recibirla dos veces a la semana, “hay lugares donde no llega nunca” y el gas es su mayor calamidad “desde que lo tomó el Consejo Comunal ahora tarda hasta dos meses en llegar la bombona y nos toca resolver”. En cuanto al acceso al sistema de  salud público, esta consiente que se encuentra destruido pero se siente afortunada de conocer a un doctor en el Hospital de Antimano que en casos de emergencia la suele ayudar. Blanca sortea como puede la ineficiencia en la garantía de acceso a derechos del Estado venezolano.

Su hija menor envía mensualmente una remesa para comprar comida, pagar los servicios básicos y los artículos de aseo persona y del hogar. Esta hija también paga los medicamentos de la abuela y los dos tíos discapacitados.  Es la que suple las emergencias, como cuando el gas tarda dos meses en llegar y hay que comprarlo en dólares. Su hija del medio  los ayuda cuando puede, su situación es distinta, afirma Blanca con voz de comprensión.  Dependen totalmente de las remeses que envían sus hijas, tanto para las necedades básicas como para cualquier emergencia que pudiera surgir.

Fotos: Proiuris

Un hermano con esquizofrenia y otro con discapacidad intelectual severa

Dentro de las obligaciones diarias de Blanca esta atender a sus dos hermanos, uno diagnosticado con esquizofrenia y el otro con discapacidad intelectual severa, que le supone una  limitación en la inteligencia y la capacidad adaptativa. Blanca con la ayuda de su mamá debe atenderlos en el día a día para suplir sus necesidades básicas de alimentación y aseo. Es quien se encarga de cumplir el seguimiento médico de requieren, que incluye visitas periódicas a doctores y exámenes de laboratorio y físicos, así como administrarles los medicamentos que necesitan.

Uno de los últimos estudios nacionales sobre las condiciones de los centros de salud mental en Venezuela data de finales de 2019 y lo coordino la Sociedad Venezolana de Psiquiatría. El estudio reveló que solo el 50 % de las camas de hospitalización en estos lugares estaba operativa, pero apenas atendían a un 24 % de pacientes de la capacidad instalada. La escasez de medicinas y los altos costos según la Federación Farmacéutica se torna grave en casos relacionados con la salud mental, pues se deja de compensar a pacientes agudos que requieren determinados medicamentos para lidiar con sus crisis o reponerse a ellas.

Blanca conoce de primera mano estas dificultadas. Afirma que el acceso regular a centros del sistema de salud es de las cosas más urgentes que necesita resolver el país, porque si bien su hija la ayuda a cubrir los gastos que generan las consultas y los medicamentos de sus hermanos es de las cargas más fuertes y que cada día aumenta sin deslumbrar mejoría en la red de hospitales y farmacias del sistema de salud público.

Tengo que darle una vuelta a mi nieto, se quedó solo aquí con el papá

El plan de la hija del medio de Blanca a finales de 2019 era salir de Venezuela, trabajar unos meses comprar los pasajes de su esposo y su hijo y rencontrarse fuera. Para ese año la crisis humanitaria compleja que se vive en Venezuela  era evidente en cualquier rincón del país, la escasez de alimentos básicos, medicamentos y las fallas de los servicios públicos eran constantes. Logro salir del país  como había planeado, pero la pandemia de Covid – 19  lo trastoco todo.

Su nieto es otro asunto que debe asumir Blanca en su día a día. Si bien nos asegura que está bien atendido por su papá y su hija no deja de mandarles dinero para cubrir sus necesidades aquí en Venezuela, ella está pendiente de él. Lo cuida cuando es necesario y participa activamente en su crianza. Entiende que no es fácil la condición de su hija, la emergencia sanitaria mundial limito las ofertas de trabajo, lo cual ha hecho que para su hija la migración se volviera aún más cuesta arriba. Blanca se lamenta que la afecta mucho emocionalmente ver como su hija está lejos de su nieto, aún no han podido reunir el dinero para reencontrase.

A pesar de su dura realidad a Blanca no se le oye derrotada. Diariamente sortea dificultades, mas bien su situación la avergüenza, no quiere se revele su nombre, como si ella fuera culpable de todo lo que le está ocurriendo. Sin embargo nos agradece la oportunidad de contar su historia y con ella mostrar la realidad actual de Venezuela, con la esperanza  de aportar un granito de arena para que las cosas mejoren.

Los datos y opiniones contemplados en este reporte fueron recabados por investigadores de Proiuris de manera directa en diversas entrevistas con las fuentes mencionadas. Se reserva el derecho al anonimato para resguardar la identidad de las fuentes.

Related Posts

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.