Desde hace 10 meses, el migrante Frank Fuenmayor fue detenido en Bogotá por haber cometido un presunto robo. Desde esa noche, no cesa la lucha de su familia por demostrar que el joven es inocente.
Reporte Proiuris
Documentación Directa
La tranquilidad desapareció del hogar de Carmen Magdaleno, de 67 años, el mismo día que su hijo Frank fue detenido en Bogotá por la Policía Nacional y señalado de haber cometido un robo a mano armada, en febrero pasado.
El muchacho tenía apenas 20 días de haber llegado a la capital colombiana. Vivió por 5 años en Cartagena luego de abandonar el estado Zulia, en Venezuela, persiguiendo con el mismo propósito que tienen los casi 2 millones de migrantes que se encuentran en el país: trabajar para brindar el futuro digno a su familia.
“Frank es un muchacho guiado por los caminos del Señor. Es un muchacho que ha trabajado siempre para la iglesia, con niños con adolescentes. Siempre ha estado involucrado en trabajos sociales, toca la guitarra y es adorador de Cristo. Jamás ha tomado un arma en sus manos”, asegura su madre.
Los hechos ocurrieron a las 9:00 de la noche del martes 16 de febrero del 2021. Desde entonces Frank Fuenmayor, de 30 años, el tercero de sus hijos, permanece detenido. Tiene la próxima audiencia preparatoria el próximo 2 de febrero del 2022. Proiuris conversó con Carmen Magdaleno sobre el viacrucis que ha vivido la familia para que su hijo recobre su libertad.
¿Nos puede contar cuándo fue detenido su hijo?
Fue detenido el martes 16 de febrero 2021, cerca de las 9:00 p.m. Él había salido de su trabajo, trabajaba con construcción y fue con mi hija y su concuñada a otro lugar a buscar una residencia, porque donde estaba viviendo el cuarto era muy pequeño y su esposa estaba por dar a luz, entonces saliendo de mirar una residencia se subieron a un taxi para dirigirse (de regreso) hacia la casa. Le dijo al taxista que lo dejara cerca de donde él vivía, en la pasarela del (estadio del) Campin
Cuando Frank se bajó del taxi ¿Qué ocurrió?
Frank cruzó la pasarela frente a una pizzería que se encuentra allí y que había sido robada minutos antes. Los policías llegaron, lo golpearon, lo acusaron de un atraco, le buscaron un arma. Él solo llevaba un bolso donde tenía su documentación y las personas que se encontraban en la pizzería les decían a los policías que dejaran al muchacho tranquilo. Mi hijo gritaba “Yo no he hecho nada” más ellos lo acusaban de que tenía un arma y el dueño de la pizzería les decía a los policías de que él no tenía nada.
¿Qué hicieron los policías con su hijo?
Lo querían embarcar en una moto y mi hijo dijo que no. Luego llegó una patrulla y lo subieron. En la patrulla iban las personas que habían sido atracadas. El policía lo cacheteaba y le decía a mi hijo que no sabía con quién se había metido. Mi hijo le decía “ Yo no he hecho nada, yo vengo de mi trabajo, jamás he tomado un arma”.
¿A dónde llevaron a Frank?
Lo llevaron a un CAI (Comando de Acción Inmediata), donde se encontraba un muchacho muy parecido a él. El muchacho tenía un bolso con un arma y los celulares que había robado. Sin embargo, las víctimas señalaron a Frank, de que él era culpable.
¿Cómo se enteró usted de que Frank estaba detenido?
Él llamo y dijo dónde estaba y que lo habían detenido. Cuando mis otros hijos llegaron al CAI, los policías les dijeron que a él no le habían encontrado nada, pero tenían que cumplir con un requisito por 36 horas. Al otro día, el jefe de mi hijo que es ingeniero llamó a un abogado, quien se presentó dónde estaba Frank y dejó sus datos que para cuando se hiciera la audiencia de presentación lo llamaran.
¿El abogado pudo vincularse al caso?
No. Para nuestro asombro, la audiencia la hicieron a las 9:00 de la noche del miércoles 17 de febrero, y no llamaron al abogado, sino a una abogada de oficio. Al otro día mi hijo habló con la abogada y ella le dijo que por ser venezolano era ladrón.
¿Qué decía el informe de los hechos?
El informe que levantaron los policías decía que Frank cargaba un arma y que había disparado y la había tirado. En el documento aparecen dos armas, una que cargaba el otro muchacho, que se llama Juan Vega y otra arma que había aparecido allí. Gracias a Dios que mi hijo no tocó ninguna de esas armas, jamás ha tocado una. Luego de la audiencia lo dejaron con medidas de aseguramiento, vimos allí que él no había tenido derecho a defensa, porque no habían llamado a abogado que habíamos contratado.
¿De qué lo acusaron?
De porte ilícito de armas, hurto a mano armada, que había disparado un arma y que lo habían encontrado infraganti.
¿Qué hicieron ustedes?
Un sobrino que vive en Medellín nos recomendó a una abogada. Ella empezó hacer sus diligencias, pidió unas audiencias para recolectar las evidencias lo videos y más cosas, porque debe haber videos donde aparece Frank cruzando la pasarela y cuando lo detuvieron. Por otro lado, el taxista que lo llevó hizo su declaración detallada donde dice que dejó a Frank en la pasarela a las 8:40 pm. A la abogada le negaron la audiencia para la muestra de evidencias.
De allí en adelante ¿qué ha ocurrido con Frank?
Se dieron varias audiencias de acusación que no fueron notificadas a la abogada de Frank, porque según informaron hubo un error en el correo de la abogada y por eso no le llegaba la información. Ya habían pasado más de 120 días y después que el juez ya había declarado que le iba a dar la libertad condicional a Frank por vencimiento de términos, la fiscal del Ministerio Público argumentó que las audiencias no se habían hecho porque la estación de policía estaba en cuarentena; que eso no era responsabilidad del juzgado y esos 120 días no eran válidos.
¿Qué respondió el juez?
Se retractó y dijo que Frank ya no iba a salir en libertad.
¿Desde ese momento hasta ahora qué han hecho ustedes?
Nos han ayudado los amigos, los hermanos de la iglesia para contratar a otro abogado y pagar los honorarios. Se nos ha hecho muy difícil porque solo el que trabaja es mi hijo mayor. Para el próximo lunes (6 de diciembre) el abogado pidió una audiencia por vencimiento de términos. Tenemos la esperanza de que Frank Eliecer salga en libertad ese día.
¿Durante el proceso ustedes han buscado otro tipo de ayuda legal y orientación para poder defenderlo?
Nosotros fuimos a ACNUR y nos dijeron que como ya teníamos abogado teníamos que dejar que el abogado hiciera su trabajo. Que tratamos de no buscar abogados de oficio, por lo que pasó con la primera abogada que dijo que por ser venezolano era ladrón. Eso nos produjo desconfianza en los abogados de oficio y por eso hemos hecho el esfuerzo de tener un abogado contratado.
¿Cuáles obstáculos se le ha presentado en el camino para lograr la libertad de Frank?
Con respecto a la documentación, Frank está completamente legal tiene su pasaporte tiene su PEP todo lo necesario para poder estar acá en el país. El principal obstáculo es la negación de darnos la autorización para obtener los videos como evidencia. El investigador que hemos contratado ya se le pagó la primera parte y no vemos que se mueva. Mi hijo lo ha llamado y no le contesta, lo último que nos dijo es que le habían entregado parte de las evidencias, pero no sabemos más.
¿Ha podido ver a su hijo?
Sí. Lo vi hace dos meses por 5 minutos. Su esposa también lo vio por 5 minutos. Físicamente está bien gracias al señor. Nosotros somos cristianos y tenemos esa fortaleza de Dios y así la tiene Frank.
Mientras Frank estaba preso, nació su primera hija. ¿La ha podido conocer?
No. No la ha podido ver. Ya hace 9 meses la abogada pidió permiso para Frank pudiera ir a presentar a la niña a la Registraduría Civil y se la negaron.
¿La familia recibido acompañamiento psicológico y jurídico?
No hemos recibido acompañamiento psicológico, pero somos creyentes y el Señor nos ha reconfortado. En la parte jurídica hemos estado pagando abogados, estamos endeudados, pero el Señor va a proveer.
¿Cómo se siente usted con toda esta situación?
Bastante triste por todo lo que está pasando, por tener a mi hijo inocente preso 9 meses.
¿Qué espera de la justicia colombiana?
¡Justicia! Y no solo justicia y no solo para mi hijo, sino para los demás que están también presos siendo inocentes. Y por la policía para que sea depurada, porque no es posible que haya policías con ese corazón tan malvado.
Si a una persona se le acusa de un delito que no cometió, tiene:
- Derecho a declararse inocente y a un juicio ante un tribunal o jurado
- Derecho a ser representado por un abogado penalista durante todo el proceso y el juicio
- Derecho a un abogado designado por el tribunal si no posee dinero para costear uno
- Derecho a que se lo considere inocente de los cargos penales en su contra, a menos que el fiscal presente pruebas que evidencien su culpabilidad más allá de toda duda razonable.
- Derecho a confrontar y contrainterrogar a los testigos llamados a declarar en su contra y a contrainterrogarlos.
- Derecho a presentar pruebas en su defensa y a exigir la presencia de testigos mediante citaciones emitidas por el secretario del tribunal.
- Derecho a permanecer en silencio durante el juicio o testificar en defensa propia.
Los datos y opiniones contemplados en este reporte fueron recabados por investigadores de Proiuris de manera directa en diversas entrevistas con las fuentes mencionadas. Se reserva el derecho al anonimato para resguardar la identidad de las fuentes.
