La organización OCHA exigió priorizar la atención de las personas refugiadas y migrantes venezolanas debido a sus graves condiciones de vulnerabilidad
Reporte Proiuris
Jackelin Díaz
Venezuela encabeza el mayor movimiento de personas refugiadas y migrantes en la historia reciente de Latinoamérica, destacó la Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (OCHA) en su informe sobre la situación de la nación en el año 2020.
El documento, de 17 páginas, menciona los sectores que fueron atendidos durante el año, entre ellas: salud, seguridad alimentaria y educación.
COVID-19
El gobierno de Nicolás Maduro ha registrado 111.951 casos de COVID-19 en el país. De esa cifra, 106.105 personas se encuentran recuperadas y 1.013 fallecieron producto de la enfermedad.
Durante el último mes, de acuerdo con el informe, la tendencia de casos
diarios confirmados ha disminuido. Entre el 19 y el 26 de diciembre se registró un promedio de 310 casos diarios, que representa una reducción del 67.2% frente al promedio de casos reportados en septiembre (946 casos diarios).
El texto también detalla que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) distribuyó 340.000 pruebas antigénicas en 24 estados del país y un total de 27 máquinas lectoras.
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La OCHA también exige priorizar la atención de los migrantes y refugiados venezolanos. Pidió la comprobación de su estado de salud, así como su estadía en los Puestos de Atención Social Integral (PASI); como en el retorno a sus lugares de origen, con el objetivo de procurar la interrupción de la transmisión comunitaria de la COVID-19.
La OCHA enumeró los desafíos para 2021:
- La escasez de combustible representa un reto constante para el desarrollo de actividades de respuesta a la emergencia humanitaria compleja en el país.
- Es necesario seguir fortaleciendo la capacidad de detección temprana, atención oportuna y vigilancia epidemiológica, especialmente, en grupos en situación de mayor vulnerabilidad en el contexto de la COVID-19.
- La OCHA exhorta a monitorear el comportamiento de la COVID-19 en personas refugiadas y migrantes venezolanas, así como asegurar la capacidad de detección de casos en este grupo
Las epidemias preexistentes
La OCHA subrayó que en el año 2021 es necesario continuar con la reorganización de los servicios de salud. El objetivo es gestionar de la mejor manera posible el impacto del aumento de casos y defunciones asociados a los retrasos en la vigilancia y en el rastreo de contactos.
La organización también indicó que se debe continuar con la provisión de equipos de protección personal para los trabajadores sanitarios.
A 24 de octubre de 2020, Venezuela reportó 5.653 casos de dengue, siendo una tasa de incidencia de 17,46 casos por cada 100.000 habitantes). Se reportaron 24 casos de dengue grave y 14 fallecidos (una tasa de letalidad de 0,248%).
Aunque se observa una disminución en los casos de dengue reportados, la tasa de letalidad se elevó 75,9% en comparación al mismo periodo de 2019 (0,141%).
Al 24 de octubre de 2020, OCHA registró 58 casos probables de chikunguña y confirmó dos. Esto representa una disminución del 63,5%, comparado con el mismo periodo del año 2.019 (159 casos).
Desde el inicio del brote de difteria en 2018, se observó una tendencia al aumento sostenido de casos. La OCHA registró, hasta el 22 de septiembre de 2020, 54 casos sospechosos, de los cuales 5 fueron confirmados (3 por laboratorio y 2 por criterio clínico o nexo epidemiológico), incluidas dos defunciones.
Los casos confirmados se refieren a personas entre dos y 14 años de edad. La fecha de inicio de síntomas del último caso confirmado fue el 25 de enero de 2020 en el municipio Bruzual, estado Yaracuy.
Hasta el 31 de octubre, se reportaron 559 casos sospechosos de sarampión, rubeola y síndrome de rubeola congénita (SRC) con cero casos confirmados.
Actualmente, solo 14% de las muestras de sangre llegan al laboratorio en cinco o menos días.
Seguridad Alimentaria
«El análisis de alerta temprana sobre los focos de inseguridad alimentaria estima que 7 millones de personas enfrentan seguridad alimentaria moderada y 2,3 millones de personas seguridad alimentaria severa», alertó la OCHA.
En octubre, un total del 10.327 niños y niñas hasta los 15 años de edad fueron tamizados para la prevención y detección de la
deficiencia de micronutrientes. 10.017 de estos niños, refiere el documento, fueron menores de 5 años.
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807 niños y niñas menores de cinco años recibieron servicios de atención nutricional para el tratamiento de la desnutrición aguda moderada en los centros de atención de los socios en 18 estados del país.
También, 74 niños entre cinco y 15 años de edad recibieron tratamiento ambulatorio para el manejo de la delgadez en ocho estados del país.
En ese sentido, la OCHA advirtió que la seguridad alimentaria tiene un efecto directo en la nutrición de los grupos en situación de mayor vulnerabilidad: niños y niñas menores de cinco años, mujeres embarazadas y lactantes.
Por este motivo, pidió mejorar la falta de acceso a alimentos y a una dieta variada, pues el estado nutricional de estos grupos puede continuar en deterioro y llevar a la desnutrición aguda, la cual aumenta el riesgo de mortalidad infantil.
Educación
La OCHA también destaca que el proceso de activación de escuelas en modalidad no presencial junto la con atención pedagógica semanal
requiere de apoyo intersectorial para asegurar un retorno seguro.
El reporte indica que las condiciones para la continuidad educativa durante el cierre preventivo de escuelas son adversas por el acceso reducido a la conectividad, la limitada disponibilidad tecnológica y los servicios eléctricos intermitentes.
«Estas circunstancias afectan en mayor medida a los NNAs más vulnerables con discapacidad, a población indígena y niños, niñas y adolescentes en situación hospitalaria«, reza el documento.
Por ello, la OCHA atendió a 33.922 niños, niñas y adolescentes mediante la implementación de actividades de apoyo psicoeducativo en línea, telefónica o mediante visitas al hogar (51% niñas y 49% niños) en Distrito Capital y Zulia.
Los desafíos en materia educativa destacados por la OCHA son:
- La falta de disponibilidad de la oferta multiplataforma a distancia profundiza por la falta acceso a internet en comunidades remotas. Por ello, se requiere financiamiento internacional para atender a los niños, niñas y adolescentes que requieren educación.
- De manera urgente, se requiere apoyo financiero para asegurar un despliegue intersectorial rápido con acciones para un retorno seguro a las escuelas en el año 2021.
