La VI Ronda del Proceso de Quito tiene como objetivo consolidar la respuesta regional y afinar los planes de ayuda a la migración venezolana en América Latina y el Caribe
Reporte Proiuris
Jackelin Díaz
«Buscamos una migración segura, ordenada y regular mediante la protección internacional con la cooperación de los países de la región». Así lo expuso Carlos Alberto Velasteguí, viceministro de Movilidad Humana de Ecuador.
Las declaraciones las ofreció este miércoles 24 de septiembre en la inauguración de la VI Ronda del Proceso de Quito, iniciativa que surgió hace dos años en la capital de Ecuador, como una respuesta regional al proceso migratorio venezolano.
En esta VI Ronda se discutieron los desafíos que plantea la pandemia de COVID-19 en materia de protección internacional de personas refugiadas y migrantes.
Recalcaron que la cooperación internacional juega un rol clave en el diseño de nuevos instrumentos técnicos y financieros para apoyar a la población venezolana en el contexto de la COVID-19.
«Debido a la naturaleza de la pandemia, las respuestas más adecuadas deben ser colectivas y son necesarias», se señala.
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En la VI Ronda del Proceso de Quito se debatió en torno a la resolución 4/2020 de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Dicho decreto insta a las naciones a orientar sus respuestas contra la pandemia bajo los principios de igualdad y no discriminación. Además, deben incorporarse enfoques diferenciados de ayuda para personas refugiadas, migrantes y otras en situación de movilidad humana.
En este sentido, se realizarán talleres técnicos para dar seguimiento a la inclusión socioeconómica de las personas refugiadas y migrantes venezolanas en los países y comunidades de acogida. También se plantearán acciones para garantizar los derechos de los que retornan a Venezuela.
6,5 millones de venezolanos en el exterior para finales de 2020
De acuerdo con el informe anual Tendencias globales del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), publicado a mediados de junio del presente año, Ecuador es el cuarto país receptor de desplazados y desplazadas venezolanos, con un registro de 374.045 personas. El tercer puesto lo ocupa Perú, con 377.864; el segundo Chile, con 452.712; y el primero Colombia, con 1.771.237 personas venezolanas.
Según los reportes de Acnur correspondientes a agosto de 2020, 5.180.000 venezolanos y venezolanas han abandonado su país y se han trasladado principalmente hacia América Latina y el Caribe. Se trata del mayor éxodo en la historia reciente de la región y una de las mayores crisis globales de desplazamiento.
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Desde marzo de 2020, las personas venezolanas refugiadas y migrantes han afrontado dificultades por la pandemia de COVID-19. Las medidas de prevención y contingencia han afectado sobre todo a las que tienen empleos precarios vinculados a la economía informal.
El representante de la Acnur y la Organización Internacional para las Migraciones, Eduardo Stein, advirtió que por los efectos de la pandemia el número de personas refugiadas y migrantes venezolanas podría aumentar a 6,5 millones a finales de 2020.
