Human Rights Watch documentó patrones en los operativos realizados por el cuerpo élite de la PNB. Robo de pertenencias, allanamiento sin órdenes judiciales y la siembra de armas o drogas a las víctimas son algunos de los más recurrentes
Reporte Proiuris
Erick S. González Caldea
Las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) han cometido ejecuciones extrajudiciales y detenciones arbitrarias en comunidades de bajos recursos que dejaron de apoyar al gobierno de Nicolás Maduro. Así lo informó la organización Human Rights Watch, en su informe “Venezuela: Ejecuciones extrajudiciales en zonas de bajos recursos”, publicado este miércoles 18 de septiembre.
José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch, explicó que desde que se crearon las FAES sus funcionarios han cometido impunemente graves violaciones de derechos humanos.
“Sus prácticas abusivas en comunidades de bajos ingresos coinciden con un patrón de denuncias generalizadas de abusos cometidos por miembros de las fuerzas de seguridad durante la denominada “Operación de Liberación y Protección del Pueblo” (OLP), que Human Rights Watch y la organización de derechos humanos venezolana Provea documentaron en 2016”, agregó.
Enfatizó que el gobierno de Nicolás Maduro utiliza el sistema de justicia para perseguir a los disidentes y opositores políticos, en vez de investigar delitos. “Las fuerzas de seguridad venezolanas están haciendo justicia por mano propia, matando y deteniendo arbitrariamente a quienes acusan de cometer delitos, sin mostrar ninguna evidencia”, señaló.
Entre junio y julio de 2019, HRW entrevistó a testigos y familiares de nueve víctimas de abusos cometidos por agentes de las FAES en Caracas, además de abogados, activistas y periodistas que trabajaron sobre presuntas ejecuciones perpetradas por miembros de las FAES.
También puedes leer: Las FAES matan en 20 segundos
“Human Rights Watch también tuvo acceso a certificados de defunción en cuatro casos que coincidían con lo relatado por las fuentes y con señalamientos de organizaciones de derechos humanos venezolanas y medios de comunicación independientes. Los métodos utilizados por las FAES y las circunstancias de las ejecuciones en los casos que documentó Human Rights Watch son consistentes con el patrón identificado por la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y por organizaciones de derechos humanos locales”, se lee en el documento.
Patrones identificados
Human Rights Watch documentó que existen patrones en los operativos hechos por las FAES, que se ha ido generalizando al pasar de los meses. El robo de pertenencias, allanamiento sin órdenes judiciales y la siembre de armas o drogas a las víctimas, con el fin de justificar las muertes de los presuntos “delincuentes”, son algunos de los esquemas usados por el cuerpo policial al cometer las violaciones a los derechos civiles.
“En varios casos, llevaban el rostro cubierto, llegaron en camionetas negras sin matrícula e irrumpieron en viviendas en vecindarios de bajos ingresos. Los agentes con frecuencia obligaban a los familiares de las víctimas a salir antes de llevar a cabo las ejecuciones. En varios casos, también robaron alimentos y otros artículos difíciles de conseguir en Venezuela debido a la crisis económica y humanitaria”, señaló.
La organización aseguró que en todos los casos de ejecuciones investigados, familiares relataron que agentes de las FAES alteraron el lugar de los hechos y manipularon la evidencia: “En algunos casos, los familiares dijeron que después de las ejecuciones tuvieron dificultades para obtener los cuerpos de sus seres queridos, los informes de la autopsia o los certificados de defunción”.
