Los galenos se reunirán en asamblea para tomar una decisión definitiva sobre el paro como último recurso para llamar la atención del gobierno nacional sobre las precarias condiciones en que trabajan
Reporte Proiuris | @Proiuris_VE | IG: @Proiuris | Facebook: @ProiurisVE
Betania Franquis Prada
Los profesionales agremiados en la Federación Médica Venezolana (FMV) evalúan paralizar sus actividades a partir del martes 10 de julio de 2018. La medida de presión se suma al paro de enfermeras que se mantiene desde el 25 de junio. Las demandas son las mismas: mejores condiciones laborales y una suficiente dotación de insumos y medicinas para cumplir con sus funciones cabalmente.
Douglas León Natera, presidente de la FMV, recordó que los médicos acordaron respaldar a las enfermeras en conflicto, en un una asamblea realizada el 26 de junio. “La situación es inaguantable. El gobierno tiene 18 años sin ocuparse de los hospitales. Ni los enfermeros ni los doctores tienen recursos, por eso nuestro respaldo al paro de enfermeras”, señaló.
En total son 14 colegios médicos los que están dispuestos a suspender sus actividades a partir del 10 julio, aunque todavía no se ha tomado la decisión definitiva.
“Nos reuniremos el martes en la FVM para tomar una decisión que tendrá connotación nacional. No descartamos un paro. De ser así, hasta 50.000 médicos podrían suspender sus actividades” afirmó Natera.
En Caracas diez Sociedades de Médicos Residentes que funcionan dentro de cada centro asistencial, ya manifestaron su intención de incorporarse a sumarse al paro. El Hospital de Niños J.M. de los Ríos, el Hospital Dr. José Ignacio Baldó (El Algodonal), El Hospiatal José María Vargas, el Hospital Dr. Ricardo Barquero (Periférico de Catia), la Maternidad Concepción Palacios y el Materno Infantil Dr. Pastor Oropeza, en Caricuao, se incorporarían a la suspensión de actividades.
El incremento salarial será el eje del debate liderado por el gremio médico, indicó Natera. La exigencia parte desde los 200 salarios mínimos para los médicos internos rurales hasta los 410 salarios mínimos para los médicos especialistas. “Es hora de que el gobierno cumpla con el derecho a la salud y respete la vida de los venezolanos. Estamos expuestos a un holocausto de la salud. Hasta ahora el Estado solo ha demostrado el profundo desprecio que le tiene a los necesitados”, señaló.
