Tres centros hospitalarios en Caracas se sumaron este martes a la suspensión de actividades. Voceros gremialistas aseguran que la protesta seguirá hasta el día viernes, en el que tienen previsto tomar nuevas acciones
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Betania Franquis Prada
Por segundo día consecutivo enfermeras de Caracas trancaron calles y avenidas para continuar con el paro laboral en exigencia de mejores salarios y condiciones de trabajo. Aseguran que mantendrán paralizadas hasta ser escuchadas por el Ejecutivo, que aún se mantiene silente.
La falta de respuestas por parte de Ministerio de Salud y del presidente Nicolás Maduro poco desanimó a los trabajadores de la red pública hospitalaria, que este martes reclamaron con más contundencia sus derechos salariales. La jornada de acciones de calle comenzó desde la 8:00 am en la Maternidad Concepción Palacios, uno de los centros asistenciales que se incorporó al paro nacional.
La protesta que en principio estuvo integrada por un pequeño grupo de trabajadores, abarrotó la avenida San Martín y se mantuvo durante el transcurso de la mañana. Efectivos de la Policía Nacional Bolivariana que llegaron a las adyacencias del materno infantil intentaron restablecer el tráfico dispersando a las enfermeras. Sin embargo, la concentración prosiguió a las puertas del recinto.
Con pancartas, llamados y bajo la consigna: “Quirófano se une al paro, salario justo” reclamaron el pronunciamiento de las autoridades del sector salud y denunciaron que sus remuneraciones son insuficientes para alimentar a sus familias. La falta de materiales quirúrgicos, antibióticos y otros insumos les impide prestar atención de calidad a las mujeres embarazadas y a los recién nacidos, denunciaron.
En los espacios de la Ciudad Universitaria, obreros, médicos, enfermeras y transeúntes se agruparon para consolidar la protesta en la entrada del Hospital Clínico Universitario. Además de reclamar salarios dignos, exigieron la inmediata liberación del enfermero Alfonso Román, quien fue detenido por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas el 4 de junio. Aseguraron que desde entonces se mantiene detenido en la sede policial de Santa Mónica. “Fue acusado injustamente de sustracción de materiales médicos”, aseguraron.
Una segunda entrega de cajas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción se realizó también a la misma hora en la entrada del centro asistencial. Dirigentes gremiales aseguraron que la repentina distribución de los alimentos, promovidos por el gobierno, fue un intento de sabotaje contra el paro liderar por el Colegio de Enfermeras de Caracas.
En la Avenida Vollmer de San Bernardino se escuchó desde las 7:00 am el llamado de las enfermeras en la entrada del hospital pediátrico José Manuel de los Ríos. Los trabajadores que contaron con el respaldo de algunos médicos y obreros se mantuvieron hasta el mediodía, pidiendo la respuesta del nuevo ministro Carlos Alvarado. A la solicitud de mejores salarios se añadió la exigencia del mantenimiento preventivo de los equipos médicos de los que dependen los niños con insuficiencia renal y otras patologías crónicas.
Una patrulla de la Policía Nacional Bolivariana intentó dispersar a las enfermeras. Algunas de ellas denunciaron que los efectivos les solicitaron sus datos de identidad. No obstante, se negaron a interrumpir la protesta.
Pablo Zambrano, secretario ejecutivo de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud, informó que este martes se sumaron tres centros hospitalarios al paro nacional convocado la semana pasada. La Clínica Popular del Paraíso, el servicio médico del Instituto Venezolano de Seguros Sociales y el Distrito de Salud número tres, ambos ubicados en San Martín, se incorporaron desde temprano y paralizaron sus servicios de consulta.
“Hoy martes fueron 24 centros de salud solo en Caracas. El paro sigue de forma contundente porque la situación es inaguantable”. En 18 entidades del país las acciones de calle también prosiguieron. La insuficiencia de los salarios que oscilan entre los 500.000 y un 1.000.000 de bolívares quincenales es la motivación de los trabajadores de la salud a demandar reivindicaciones salariales.
Según Zambrano, otros 30.000 médicos integrales de sistema Barrio Adentro están en situación crítica, debido a los bajos salarios. Indicó que el paro se mantendrá hasta el viernes, cuando se tiene prevista una asamblea en la que el gremio decidirá las próximas acciones. “Seguiremos paralizados y en protesta ciudadana por nuestro derecho a una vida digna. Estamos firmes y en la búsqueda de soluciones”. Hizo un llamado al recién designado ministro de salud, Carlos Alvarado a pronunciarse en nombre de la directiva del despacho ministerial, regentado por 17 ministros desde 1999.
